jueves, 1 de enero de 2015

Objetivos - ¿Vas a cumplirlos?

¿Te acuerdas de los tiempos de estudiante? Seguro que te suenan objetivos como voy a estudiar más este año, esta evaluación voy a sacar mejores notas, este año aprendo inglés…

El mes de enero es un gran mes para los gimnasios, es el mes de los buenos propósitos: hacer ejercicio, comer más sano, aprender inglés, ver más a los amigos y a la familia… Y eso nos lleva a apuntarnos al gimnasio, a la academia de inglés… Lo que puede ser un gran primer paso.

¿Hasta dónde llega tu compromiso? ¿Vas a ir al gimnasio? ¿Vas a ir a la academia de inglés? O vas a hacer como ese estudiante que este año iba a estudiar el doble que el año pasado; como el año pasado no estudió nada este año toca nada de nada. O que va a estudiar más y como el año pasado no estudio nada con que estudie este año un minuto ya ha cumplido.

Lo peor de todo es que muchas veces nos planteamos los objetivos sin convicción, sabiendo que no los vamos a cumplir, y tan convencidos estamos de que no vamos a cumplir que no hacemos ningún esfuerzo para ello. Los objetivos no cumplidos van minando nuestra autoestima, la propia estima, el creer en nosotros mismos.

Para que alguien sea de confianza tiene que cumplir, nos fiamos de los demás porque las personas son de fiar. ¿Cuándo crees que nos fiamos de nosotros mismos? Cuando somos de fiar con nosotros, cumplimos lo que nos prometemos, cumplimos con nuestros objetivos. Por eso la forma de desarrollar la autoconfianza es cumplir con nosotros mismos, tenemos que alcanzar los objetivos.

Foto de Chris Potter - Checklist
Algunas ideas para que tus objetivos se conviertan en una realidad y no se queden en papel mojado o en algún lugar de nuestra mente. Para que los objetivos cumplidos vayan reforzando la autoconfianza y la autoestima.

Lo primero es encontrar la razón o razones que hacen ese objetivo poderoso, apetecible, el para qué y el porqué de lograr el objetivo. Si me planteo perder peso puede ser por estética, para que me dejen de doler las rodillas, para que me valga la ropa… Cuanto más importantes sean para mí los motivos mayor motivación encontraré para vencer las dificultades.

Es deseable que el objetivo cumpla con la regla SMART:
  • Específico (Specific): qué es lo que quieres conseguir (5W + 2H: What, Why, Who, When, Where, How & How Much)
  • Medible: para determinar si se ha conseguido y el grado de avance en la consecución del objetivo.
  • Alcanzable: que sea posible, realista y a la vez que suponga un reto que nos pueda motivar.
  • Relevante: que tenga importancia para nosotros en este momento y a lo largo de la vida del objetivo.
  • Establecido en el tiempo: con una fecha límite para su cumplimiento, en la que podamos revisar si se ha conseguido.
Además, para no dispersarnos y estar enfocados, los objetivos deben ser pocos, entre 3 y 7 es suficiente para todo el año. De este modo los podremos tener en mente y nos podrán guiar en el día a día de nuestras decisiones.

Para alcanzar el objetivo debemos de poner los medios, definir el plan, si el objetivo es perder siete kilos antes del 30 de junio nos podemos plantear hacer dieta, salir a correr 40 minutos tres veces por semana, etc. En la mayoría de los casos es mejor un mierdi-plan (un plan sencillo) que se cumpla que un cojo-plan (un plan complicado) que no se cumpla.

¿Tienes tus objetivos para este año? ¿Qué es eso que si haces/logras este año te hará sentirte satisfecho? ¿Los tienes por escrito? ¿Cómo sabrás que lo has conseguido? ¿Tienes un plan? ¿Realmente vas a hacer los esfuerzos para lograrlos? Ponernos objetivos que de antemano sabemos que no vamos a cumplir sirve para minar nuestra autoestima. Hazte un favor, crece en autoestima y cumple contigo mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario