domingo, 7 de junio de 2020

La “nueva” normalidad, tú la eliges


Esta semana leía sobre el síndrome de la cabaña y me ha encantado el enfoque de un artículo, que argumentaba sobre el tema, proponiendo que lo que puede pasar es que no queramos volver a la “vida de mierda” de antes, ansiosa e hiperproductiva.

Estamos esperando a que nos propongan cuál va a ser la “nueva” normalidad, como si nos lo tuviesen que imponer, sin darnos cuenta de que tenemos la mayor responsabilidad en decidir cómo queremos que sea nuestra vida, ahora y siempre.

Siempre podemos escoger una nueva normalidad, un nuevo estilo de vida. No tenemos por qué esperar a que el cambio venga de fuera. Seguro que las elecciones tendrán consecuencias. El miedo a equivocarnos puede impedir que elijamos.

La nueva normalidad. Imagen de Gerd Altmann en Pixabay 

Ante tanto cambio, hemos descubierto rutinas nuevas que nos van bien y tememos perder, arrastrados por la inercia de la socialización y de nuestros antiguos hábitos.

Normalidad, viene de norma, lo corriente, lo acostumbrado ¡Cómo si fuese igual para todos! ¿Qué es lo normal? Cada uno tenemos nuestra opinión. Escoge que es lo normal para ti, esa es tu responsabilidad.

Una gran ventaja es que tú decides y que además puedes cambiar de opinión cuando quieras, tus decisiones no tienen por qué ser eternas. Puede que te sientas atado por tus planes, son tuyos, y si cambia el entorno o tú cambias es lógico que tus planes cambien.

Otro gran miedo de la vuelta a la “normalidad” es la vuelta de muchos “compromisos” que nos llevan a estar más ocupados todavía, aunque para algunos también va a ser una liberación.

Contesta a la pregunta ¿Tienes tiempo para hacer todo lo que quieres? Pongo quieres y no tienes, porque el querer te responsabiliza y si usas el “tengo qué” pones la responsabilidad fuera (no será que quieres porque te gustan las consecuencias o porque temes unas consecuencias negativas; al fin y al cabo, puedes querer estudiar porque quieres aprender o porque temes el suspenso).

Volviendo a ¿Tienes tiempo para todo? Si la respuesta es sí, estupendo, solo te queda escoger que hacer con el tiempo que te sobra. Si la respuesta es no, más habitual a ciertas edades, toca escoger que vas a dejar, porque si el día no da para todo es una ilusión el creer que podrás hacerlo todo.

Hora de escoger cómo quieres que sea tu vida. Hoy es una oportunidad tan buena como cualquier otra. Y si mañana cambias de opinión, pues cambia de elección.

1 comentario:

  1. Muy de acuerdo, el tiempo no alcanza para todas las tareas, elegir las que como te llevan a tus objetivos es la elección, muy buena reflexión.
    Saludos

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