Hoy
escribo con el corazón encogido. Nuestro querido amigo Gabi nos ha dejado,
demasiado pronto, con apenas 52 años. Su proceso, tan parecido al de Pau Donés (nos dejó con 53),
me recuerda lo frágiles que somos y lo urgente que es vivir. Pau nos lo
recordaba con aquella frase que llevo en una de sus camisetas: “¡Vivir es
urgente!”. Gabi, en su último mensaje, me escribía: “¡Disfruta la vida! Al
final nos llevamos eso”
Gabi
convivió casi seis años con el cáncer. No fue un camino fácil, pero sí digno,
valiente, lleno de esas enormes ganas de vivir que siempre tuvo. Se fue en paz,
sabiendo que había luchado hasta el final. Como Pau en su libro “50 palos... y sigo soñando”, Gabi nunca
dejó de soñar ni de crear. Poeta, pintor, filósofo de la vida… un artista
libre, que se inventaba sus propias reglas, resiliente, vital, siempre
dispuesto a beberse la vida a sorbos grandes.
En
enero pasado presentó su libro de poemas “Versos abuhardillados”. Fue un
momento precioso, y un regalo poder acompañarle sabiendo, aunque sin decirlo
demasiado alto, que la cuenta atrás se acercaba. Aun así, siguió siendo él:
sensible, lúcido, juguetón con las ideas, con la mirada siempre puesta en la
belleza de lo pequeño.
![]() |
Gabi con su hija Lara, firmando sus "versos abuhardillados" - en su dedicatoria me ponía que el tiempo no pasa salvo que nos miremos en los espejos |
Gabi,
como Pau, nos dejó una herencia inmensa: su forma de estar en el mundo, de amar
la vida, de recordarnos que no sabemos cuánto tiempo tenemos, pero sí sabemos
que algún día nos iremos. Y en ese intervalo, la única opción es vivir,
intensamente, agradecidos, presentes.
Hoy
quiero decirle: ¡Qué bueno haberte conocido, qué bueno haber caminado contigo!.
Gracias,
Gabi, por tanto. Tu voz, tu humor ácido y tu risa nos seguirán acompañando, y
tus versos seguirán vivos.
La
canción de Pau, Eso que tú me das,
resuena más fuerte que nunca: eso que nos diste, Gabi, lo llevaremos siempre
con nosotros.
Descansa, amigo. Y gracias por recordarnos, una vez más, que vivir es urgente.
No se puede describir con más claridad , amor, delicadeza . Tu, como el, has demostrado y demuestras cada día con hechos el valor inconmensurable de la amistad … y como dices, urge que vivamos y ojalá él se enorgullezca de verlo …
ResponderEliminar